sábado, 26 de abril de 2008

Nuestro Cuerpo: Una máquina finita


Ser un “empresario saludable”, mental, física y emocionalmente, ayuda a elevar los niveles de productividad laboral diaria, entre un 25% y un 28 % (Universidad de Chicago, EE.UU).

Desafortunadamente en estudios realizados en América Latina, se ha encontrado que el empresario promedio, presenta altos niveles de deterioro, fatiga física y mental. Según el Instituto de Prevención, Salud y Seguridad Laboral (IPSASEL), los accidentes laborales, en nuestro continente, producto de la fatiga generan pérdidas anuales que equivalen al 10% PIB de la región, lo cual es una cifra para tomar en cuenta.

De investigaciones como estas se pudo obtener que son los trastornos músculo-esqueléticos (dolencias físicas) los que se presentan con más frecuencia, seguidos de trastornos respiratorios y de enfermedades psicosociales, donde destaca el estrés laboral.

Inclusive, producto del clima de agobio y estrés que vivimos hemos llegado a desarrollar nuevos trastornos psico-emocionales, siendo uno de los más destacados el Síndrome Pre-Laboral, el cual no es más que sensaciones corporales de fatiga, dolor de cabeza, aumento de la presión sanguínea, dolores musculares, entre otros, producto del reinicio de las actividades laborales luego de un período de descanso.

En definitiva, nuestro cuerpo nos está enviando un mensaje, nos dice que estamos agobiados, fatigados, que nos falta más actividad física, en fin que necesitamos un tiempo para nosotros mismos; pero desafortunadamente, y a pesar de esta información, no estamos reaccionando y además muchas de las propuestas, organizacionales y gubernamentales, para mejorar esta condición van alrededor de promover actividades de recreación, de programas de administración del tiempo, de reducción del estrés, etc., sin estar articuladas dentro de un plan o programa continuo e integral y además están principalmente enficadas a modificar los factores externos.

Con esto no quiero decir que no existen factores fuera de nuestro control que provoquen estas reacciones, más bien lo que quiero transmitir es que primero debemos hacer algo nosotros mismos, que es necesario que actuemos sobre aquellas cosas que están bajo nuestro control, por que al final es nuestra salud la que está en juego.

Muchas personas dicen que “no tienen tiempo”, que “es difícil seguir una rutina”, que “el trabajo no lo permite”, etc., todas excusas para justificar una falta de compromiso con su bienestar físico; pero ahora yo te voy a regalar una serie de actividades y rutinas que puedes hacer dentro de tú ambiente laborar para mejorar tú calidad de vida.


  • Para mantener la energía física en un estado óptimo, te dejo las siguientes recomendaciones:

  • Haga sentadillas, que consisten en flexionar las rodillas, subiendo y bajando de 30 a 40 cm. Se remiendan 3 series de 15 a 20 repeticiones

  • Tenga pequeñas pesas en el escritorio, y haga ejercicios para brazos y hombros.
    Salga por la cuadra y haga 3 min. de trote o caminata al día

  • Practique Brain Gym®

  • Practica Learning Gym@

  • Realiza ejercicios de estiramiento corporal, para cada una de las partes del cuerpo.

  • Practique respiraciones y visualizaciones todas las mañanas.
    Haga una pausa cada 90 min. dentro de su rutina, saliéndose del ambiente en el que se encuentra.

Recuerda que eres tu quien decide lo que hace con su cuerpo, además debes estar claro que lo que hagas ahora será el reflejo de lo que serás más adelante.


“Halla el tiempo de leer. Halla el tiempo de ser amigo. Halla el tiempo de trabajar: es la fuente de la sabiduría. Hacer esto Es el camino de la felicidad. Es el precio del éxito”.
Madre Teresa de Calcuta

1 comentario:

Adrián Cottin Belloso dijo...

Hola Luis Augusto,
Te felicito por tu blog.
Desde ya lo recomendaré en el mío.
Leeré con detenimiento tus artículos y los comentaré.
Saludos y que sigan los éxitos,
Adrián Cottín
www.adriancottin.com